Los municipios vallisoletanos de Íscar y Pedrajas de San Esteban recurren contra el mantenimiento del confinamiento acordado por la Junta de 14 días adicionales.
En la ciudad de Reus el consumo tiene que realizarse siempre en mesa a partir de las 0 horas del 18 de septiembre y por espacio mínimo de siete días, según fija la Resolución 2252/20, de 17 de septiembre. Es limitado el aforo al 50% en el interior de los establecimientos y se tiene que garantizar una distancia mínima de 1'5 metros entre mesas o agrupación de mesas, con un máximo de 10 personas/mesa o agrupación de mesas. En las terrazas la capacidad de ocupación es al 50%, además de garantizar una distancia de 2 metros entre mesas o grupos de mesas con un máximo de 10 personas/mesa o agrupación de mesas. El cierre es a la 1 hora de la madrugada sin que puedan admitirse nuevos clientes a partir de las 0 horas. No hay mención expresa a los establecimientos de juego en general.
En el caso de los municipios castellanos sus respectivos alcaldes argumentaron que los recursos obedecen a que "los contagios son de carácter social y familiar, circunstancias que no pueden evitarse con el confinamiento de las localidades". Ambos coinciden en criticar la medida adoptada eL viernes "porque incluye tres fines de semana consecutivos, lo que hará mucho daño a la hostelería. Pedimos que no se limite la movilidad".
La Conselleria de Sanidade de la Xunta ha incluido al municipio de Verín en las restricciones que mantienen las localidades de Santiago, Silleda, Lalín, Lugo, Ourense, Poio, Pontevedra, Vilaboa, Marín y varios barrios de A Coruña. Los aforos quedan limitados al 50% como norma general, que en el caso de hostelería suprime el consumo en barra, y en las terrazas la capacidad se limita al 75%.