Antonio Garamendi pide que los 15.000 millones de euros transferidos a los ayuntamientos se destinen a suprimir el IBI y ayudar a la hostelería en vez de a gastos corrientes.
Durante su intervención ayer en el Nueva Economía Forum Garamendi entiende una contradicción que los ERTE concluyan el 31 de enero y el 'estado de alarma' el 9 de mayo. "Es una fecha que genera una situación de indefinición enorme y poco favorable para las empresas que no saben a qué atenerse", señaló. "El planteamiento tenía que haber sido a 15 días o un mes. Los cierres adoptados en la hostelería por determinadas comunidades autónomas está causando un daño irreparable. No puede pedirse a estos sectores que asuman una parte de las cuotas a la Seguridad Social de los trabajadores en ERTE. Por eso las exoneraciones tienen que llegar al 100%".
A juicio del presidente de CEOE, "lo más fácil es decir que se cierre, pero hay medidas eficaces desde el punto de vista sanitario que no suponen el cierre".