Tras explicas en el documento que acompaña al proyecto de real decreto de Entornos Más Seguros, "que desde 2015 hasta la fecha, los distintos estudios realizados muestran un dato de 'trastorno del juego' en torno al 0'3% de población mayor de 18 años en el último año", Consumo acusa que "los estudios de prevalencia no capturan con precisión todo el espectro de eventuales patologías".

La Memoria apela en reiteradas ocasiones al 'principio de precaución' para lo que se apoya en el artículo 191 del tratado de Funcionamiento de la Unión Europea, que se refiere a las políticas de Medio Ambiente, como justificativo de la intensificación de las medidas.

Y en el ámbito específico de Juego se apoya en el libro '¿Está aumentando la población con adicción al juego?'-Norte de Salud Mental de H.López-González H. y A. Estévez, cuyas reflexiones son:

• "Si la ratio de proporción de jugadores patológicos respecto de jugadores totales es estable en el tiempo, un aumento de los jugadores activos debería suponer un aumento de los problemas de juego". Aún así, la Memoria admite que tal teoría tiene que recogerse con cautela.
• Aumento de inscripciones en el Registro General de Interdicciones, que se identifica como "un dato objetivo". Cierto, pero el Ministerio de Consumo no puede obviar que la autoprohibición no es sinónimo de persona afecta a patologías de juego.
• Aporta también la referencia de FEJAR sobre un incremento en tratamientos a perfiles más jóvenes.
• Pero la más llamativa de las reflexiones es la acusación de que "existe una corriente cada vez más extendida de que los estudios de prevalencia no capturan con precisión todo el espectro del daño que el 'juego problemático acaba ocasionando".

La Memoria analiza "la creciente concentración de la mayor parte de los ingresos de los operadores en un número reducido de consumidores".

El documento enfatiza como objetivos "la protección de los adultos mayores de edad en edad temprana" porque los identifica como "colectivo particularmente sensible a mensajes y patrones de juego inadecuados"; la protección de ciudadanos que hayan desarrollado tales comportamientos, y; la protección de cualquier perfil de jugador, independientemente del riesgo.