La empresa que asumiera durante décadas el monopolio del Juego en Suecia quiere seguir apoyando publicitariamente a la selección de fútbol en la Copa del Mundo de Qatar 2022.
Lo ha hecho durante décadas y lo quiere seguir haciendo con vistas a la competición mundialista. Y es que la proyección mediática y promocional de la marca es muy relevante en este tipo de acuerdos.
Además de la sensibilidad que para las autoridades levanta el patrocinio de una empresa operadora de juegos, la celebración del Mundial en Qatar abre otra brecha: un eventual boicot a un país que no respetaría los derechos humamos como se acusa al país del Golfo.
Los directivos de Svenska Spel han señalado que la ambición de la empresa es contribuir a una mejora social a largo plazo y se decantan por apoyar a la selección en este Mundial antes que fomentar un eventual boicot.