Los 34 equipos de la Liga Profesional, además de la Liga Libra y la Liga Forte Uniao firman una petición que urge al Senado a rechazar la propuesta impulsada por el senador Eduardo Girao.
En la respuesta unificada los clubes brasileños argumentan que la prohibición causaría un quebranto económico a todos los niveles del fútbol profesional ya que se está excluyendo la principal fuente de ingresos del fútbol brasileño, lo que interferirá potenciales contratos.
De hecho, 39 clubes de los 40 que compiten en las Ligas A y B ya cuentan con acuerdos de patrocinio con una marca de juego online.
Además, se añade una circunstancia adicional: la Confederación Brasileña de Fútbol solicitó que el Gobierno garantizara una cuota del 4% sobre los ingresos brutos recaudados por las apuestas para las ligas de fútbol. Esta propuesta fue rechazada por el Ejecutivo brasileño.